28/12/18

Feliz Año Nuevo

PD1: Que el 2019 nos llene de ilusión, que hagamos cosas mejores que este viejo 2018 que despedimos, que nos transforme en mejores personas, que trasmitamos la felicidad y la alegría a todos…

27/12/18

no somos autosuficientes

PD2: La innovación y la rápida disponibilidad de cosas y servicios personales nos hace sentir autosuficientes y nos despoja de la presencia de Dios en nuestras vidas, incluso en las navidades consumistas que tenemos. Sólo cuando una tragedia nos golpea despertamos de nuestro sueño para ver a Dios en medio de nuestro “valle de lágrimas”... Incluso debiéramos estar agradecidos por esos momentos trágicos, porque seguramente sirven para robustecer nuestra fe.

No deberíamos esperar a nuestra cruz, sino deberíamos tratar al Señor más a menudo, en los tiempos buenos, dando muchas gracias ya que somos conscientes que la cruz aparece…

21/12/18

que acojamos al Niño Dios que nace

PD1: Te deseo unas muy felices navidades, que acojamos el Niño Dios que nace de nuevo, que le metamos en nuestro corazón y le tratemos todos los días.

20/12/18

no centrar la Navidad en nosotros

PD1: El Papa para los días previos de la Navidad:

Procuremos no mundanizar la Navidad, ni convertirla en una bonita fiesta tradicional pero centrada en nosotros y no en Jesús. Celebraremos la Navidad si sabemos dedicar tiempo al silencio, como hizo José; si le decimos a Dios “aquí estoy”, como María; si salimos de nosotros mismos para ir al encuentro de Jesús, como los pastores; si no nos dejamos cegar por el brillo de luces artificiales, de regalos y comidas, y en cambio ayudamos a alguien que pasa necesidad, porque Dios se hizo pobre en Navidad.

19/12/18

perdón, gracias y ayúdame

PD1: Ayer me equivoqué. Esto dije:

La vida plena:

1 Ama

2 Enseña

3 Cuida a los tuyos

4 Da sin esperar nada

5 Cumple tus promesas

Y se me olvidó algo muy importante que debía haber incluido:

6 Perdona

Me lo reprochó una amiga con mucha razón. La importancia del perdón, sobre todo en los cristianos. Perdonar y olvidar, borrar el rencor, perdonar la ofensa y a quien nos la ha hizo. Lo rezamos todos los días en el Padre Nuestro…, pero somos olvidadizos…

Incluso metería otros dos números más:

7 Da gracias

8 Ayúdame

Gracias a Dios por todo lo que nos regala, y pedirle que nos ayude siempre. Sabemos que solos no podemos hacer nada y que todo es gracias a Él y que nos mima como sus hijos pequeños que somos…

18/12/18

plenitud de la vida

PD1: La vida plena:

1 Ama

2 Enseña

3 Cuida a los tuyos

4 Da sin esperar nada

5 Cumple tus promesas

17/12/18

desinteresadamente

PD1: ¿Dónde encontramos el rostro de Cristo? En los otros, en el prójimo más cercano. Es muy fácil compadecerse de los niños hambrientos de Etiopía cuando los vemos por la TV, o de los inmigrantes que llegan cada día a nuestras playas. Pero, ¿y los de casa? ¿y nuestros compañeros de trabajo? ¿y aquella parienta lejana que está sola y que podríamos ir a hacerle un rato de compañía? Los otros, ¿cómo los tratamos? ¿cómo los amamos? ¿qué actos de servicio concretos tenemos con ellos cada día?

Es muy fácil amar a quien nos ama. Pero el Señor nos invita a ir más allá, porque “si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa vais a tener?” (Mt 5,46). ¡Amar a nuestros enemigos! Amar aquellas personas que sabemos, con certeza, que nunca nos devolverán ni el afecto, ni la sonrisa, ni aquel favor. Sencillamente porque nos ignoran. El cristiano, todo cristiano, no puede amar de manera “interesada”; no ha de dar un trozo de pan, una limosna al del semáforo. Se ha de dar él mismo. El Señor, muriéndose en la Cruz, perdona a quienes le crucifican. Ni un reproche, ni una queja, ni un mal gesto...

Amar sin esperar nada a cambio. A la hora de amar tenemos que enterrar las calculadoras. La perfección es amar sin medida. La perfección la tenemos en nuestras manos en medio del mundo, en medio de nuestras ocupaciones diarias. Haciendo lo que toca en cada momento, no lo que nos viene de gusto.

14/12/18

imitarle

PD1: Dios es Amor, “que hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos” (Mt 5,45). Y el hombre, chispa de Dios, ha de luchar para asemejarse a Él cada día…, para imitarle. ¡Qué lejos estamos!

13/12/18

el ser humano tiene derechos

PD1: Porque somos hechos a imagen y semejanza de Dios, hacerle algo a un ser humano es malo, incluido el aborto…

11/12/18

otro nieto más...

PD: Llevo varios días dando muchas gracias a Dios: he vuelto a ser abuelo, el séptimo nieto. El día de la Inmaculada, ¡qué buen día para nacer!, vino al mundo la cuarta hija de mi hija mayor. Una monería como te puedes figurar… Ahora toca darle muchas gracias y pedir por tan buena familia, por su futuro, porque sigan siendo tan buenos cristianos, por el enorme ejemplo que darán allá donde vayan. 
Siempre es lo mismo, mostrarnos y dar mucho ejemplo de que sí se puede…, es la única forma bonita de evangelizar y, con más nacimientos, de poblar esta gran Tierra donde Dios nos puso para que nos multiplicáramos y le amáramos.

10/12/18

nos estrenamos cada día

PD1: La actitud de alerta, de preparación, no puede ser intermitente, sino que ha de ser permanente. Por esto, nos dice el Señor: “Estad en vela, pues, orando en todo tiempo” (Lc 21,36). ¡En todo tiempo!: ésta es la justa medida del amor. La fidelidad no se hace a base de un “ahora sí, ahora no”. Es, por tanto, muy conveniente que nuestro ritmo de piedad y de formación espiritual sea un ritmo habitual (día a día y semana a semana).

Ojalá que cada jornada de nuestra vida la vivamos con mentalidad de estrenarnos; ojalá que cada mañana, al despertarnos, logremos decir: Hoy vuelvo a nacer (¡gracias, Dios mío!); hoy vuelvo a recibir el Bautismo; hoy vuelvo a hacer la Primera Comunión; hoy me vuelvo a casar... Para perseverar con aire alegre hay que “re-estrenarse” y renovarse.

7/12/18

conversión

PD1: ''El Cielo está lleno de pecadores convertidos y hay espacio para más'', San José de Cupertino. No pienses que uno ha sido tan creyente siempre… Todos pasamos por una fase de conversión, a todos nos llega el momento en que cambiamos el chip y decimos un sí muy grande a Dios. No preguntes lo que hicimos antes ya que no fue nada bueno. Esa conversión tiene un antes y un después. Y se logra estar en el cielo una vez convertido, no hay que esperar a morirse…

5/12/18

pescar hombres

PD1: Cuando el Señor les dijo que iban a ser pescadores de hombres, era que iban a hacer apostolado, como ahora… “Pescar hombres” quiere decir ayudar a quienes nos rodean en la familia y en el trabajo a que encuentren a Cristo que es la única luz para nuestro camino. Es por eso por lo que no podemos hacer sino hablar de las cosas de Dios, mostrarnos y mejor aún, mostrarle a Él.

4/12/18

petición apostólica

PD1: Al pedir en el Padrenuestro que venga a nosotros su reino, expresamos nuestro deseo de que crezca el número de personas que encuentren en Dios la fuente de la felicidad y se esfuercen por seguir el camino que Él nos ha enseñado, el camino de las bienaventuranzas… Es una petición para nosotros y los demás, es apostólica.

3/12/18

ser sencillo

PD1: Lo bueno de Twitter es que te encuentras con estas preciosidades… ¡Qué difícil es ser sencillo y quitarse el orgullo y la vanidad…!

30/11/18

hacer una novena es muy fácil...

PD1: Te propongo que hagamos una novena a la Inmaculada. Es muy fácil, no hay que ir a la catedral ni hacer cosas raras. Hoy empieza. Los nueve días antes del día 8/12, hay que hacer tres cosas cada día:

+ hacer mejor la oración diaria (si no se hace, empezar a hacerla)

+ intentar mejorar nuestro trabajo profesional (los jubilados también lo tienen)

+ una pequeña mortificación cada día (sin azúcar, sin mantequilla, una sonrisa a todos, simpatía…, lo que sea, por alguien, por su mejora espiritual)

Ya sabes que celebramos a la Virgen María en su Inmaculada Concepción, que quiere decir que fue concebida sin pecado original, sin esa concupiscencia de los sentidos que todos los demás tenemos. Y fue gracias al Papa Pio IX, por culpa de los españoles…, que ante nuestra insistencia lo proclamó, hace 150 años, como un dogma de fe.

29/11/18

apostolado por amor al otro

PD1: Se hace apostolado porque se quiere al otro, por amor al otro. Hacer apostolado es querer en el otro un bien espiritual. Y lo hacemos porque le queremos. No, nosotros nada podemos, somos unos meros instrumentos. El que le dará o no la fe, el que querrá que se acerque a Él es el Señor…, nosotros lo hacemos solo por amor de Dios, y de esa persona que queremos que siga nuestro camino.

28/11/18

¿familia perfecta?

PD1: Familia, lugar de perdón (Papa Francisco)

No hay familia perfecta. No tenemos padres perfectos, no somos perfectos, no nos casamos con una persona perfecta ni tenemos hijos perfectos. Tenemos quejas de los demás. Decepcionamos a unos y a otros. Por eso, no hay matrimonio sano ni familia sana sin el ejercicio del perdón. El perdón es vital para nuestra salud emocional y la supervivencia espiritual. Sin perdón la familia se convierte en una arena de conflictos y un reducto de penas.

Sin perdón la familia se enferma. El perdón es la asepsia del alma, la limpieza de la mente y la alforria del corazón. Quien no perdona no tiene paz en el alma ni comunión con Dios. La pena es un veneno que intoxica y mata. Guardar el dolor en el corazón es un gesto autodestructivo. Es autofagia. El que no perdona se enferma física, emocional y espiritualmente.

Y por eso la familia necesita ser lugar de vida y no de muerte; el territorio de cura y no de enfermedad; el escenario de perdón y no la culpa. El perdón trae alegría donde la pena produjo tristeza; en la que el dolor causó la enfermedad.

27/11/18

una fiesta, pero no un espectaculo

PD1: Será una gran fiesta…, pero no es un espectáculo

No es un espectáculo

El Reino de Dios crece cada día gracias a quien da testimonio de él sin hacer “ruido”, rezando y viviendo con fe sus tareas en la familia, en el trabajo, en su comunidad de pertenencia. Lo subrayó hoy el Papa Francisco en la homilía de la Misa matinal celebrada en la capilla de Casa Santa Marta.

En el silencio, quizás de una casa donde “se llega a fin de mes sólo con medio euro” y sin embargo no se deja de rezar y de cuidar a los hijos y a los abuelos: allí está el Reino de Dios. Lejos del clamor, porque el Reino de Dios “no llama la atención” exactamente como no la atrae la semilla que crece bajo la tierra.

El Papa Francisco se deja guiar en su homilía por las palabras del pasaje del Evangelio de Lucas, donde a la pregunta de los fariseos: ‘¿cuándo vendrá el Reino de Dios?’, Jesús replica: vendrá un día en el que “os dirán: ‘Está allí’, o: ‘Está aquí’; no vayáis, no les sigáis”. “El Reino de Dios – asevera el Papa –no es un espectáculo. El espectáculo muchas veces es la caricatura del Reino de Dios”.

“¡El espectáculo! Nunca dice el Señor que el Reino de Dios sea un espectáculo. ¡Es una fiesta! Pero es distinto. Es fiesta, cierto, es bellísima. Una gran fiesta. Y el Cielo será una fiesta, pero no un espectáculo. Y nuestra debilidad humana prefiere el espectáculo”.

Muchas veces, prosigue el Papa Francisco, el espectáculo es una celebración – por ejemplo las bodas – a la que se presenta gente que más que a recibir un Sacramento “viene a hacer el espectáculo de la moda, hacerse ver, la vanidad”. En cambio, repite, “el Reino de Dios es silencioso, crece dentro. Lo hace crecer el Espíritu Santo con nuestra disponibilidad, en nuestra tierra, que debemos preparar”. Además, añade citando las palabras de Jesús, también para el Reino llegará el momento de la manifestación de fuerza, pero será sólo al final de los tiempos.

“El día que hará ruido, lo hará como la descarga del rayo, que brilla de un extremo a otro del cielo. Así será el Hijo del hombre en su día, el día que hará ruido. Y cuando uno piensa en la perseverancia de tantos cristianos que sacan adelante la familia – hombres, mujeres – que cuidan a los hijos, cuidan a los abuelos, y llegan a fin de mes con medio euro solo, pero rezan, allí está el Reino de Dios, escondido, en esa santidad de la vida cotidiana, esa santidad de todos los días. ¡Porque el Reino de Dios no está lejos de nosotros, está cerca! Esta es una de sus características: cercanía de todos los días”.

También cuando describe su vuelta en una manifestación de gloria y de poder, sin embargo Jesús – insiste el Papa Francisco – añade en seguida que “antes es necesario que sufra mucho y sea rechazado por esta generación”. Esto significa, observa el Papa, que “también el sufrimiento, la cruz, la cruz cotidiana de la vida – la cruz del trabajo, de la familia, de llevar adelante las cosas –esta pequeña cruz cuotidiana es parte del Reino de Dios”. Y concluye: pidamos al Señor la gracia de “cuidar el reino de Dios que está dentro de nosotros” con “la oración, la adoración, el servicio de la caridad, silenciosamente”.

“El Reino de Dios es humilde, como la semilla: humilde pero se hace grande, por la fuerza del Espíritu Santo. A nosotros nos toca dejarlo crecer en nosotros, sin vanagloriarnos: dejar que el Espíritu venga, nos cambie el alma y nos lleve adelante en silencio, en paz, en la quietud, en la cercanía a Dios, a los demás, en la adoración a Dios, sin espectáculos”.

26/11/18

lo que hemos dado...

PD1: ''Recuerda que cuando abandones esta tierra, no podrás llevar contigo nada de lo que has recibido, solamente lo que has dado: un corazón enriquecido por el servicio honesto, el amor, el sacrificio y el valor'', San Francisco de Asís

23/11/18

hay que aprender a perdonar

PD1: Queremos que Dios nos perdone y que los demás también lo hagan; pero nosotros nos resistimos a hacerlo. Cuesta pedir perdón; pero darlo todavía cuesta más. Si fuéramos humildes de veras, no nos sería tan difícil; pero el orgullo nos lo hace difícil. Hay que aprender a perdonar, todos los días…

22/11/18

poner amor en el trabajo

PD1: ''En el momento de la muerte, no se nos juzgará por la cantidad de trabajo que hayamos hecho, sino por el peso de amor que hayamos puesto en nuestro trabajo'', Madre Teresa de Calcuta.

20/11/18

los que menos ayudas damos a embarazadas...

PD2: Mientras que en Alemania, donde nacen casi los mismos por cada mil habitantes, invierten 735 euros por mujer embarazada al año, en el país la media es de 7,6 euros anuales…

España no es país para embarazadas

19/11/18

no mentirás...

PD3: El Papa Francisco habló sobre el octavo mandamiento: “No dirás falso testimonio ni mentirás”

Queridos hermanos y hermanas:

La catequesis de hoy la dedicamos al octavo mandamiento: «No dirás falso testimonio ni mentirás»; este mandamiento prohíbe falsear la verdad en las relaciones con los demás.

Es grave vivir de “comunicaciones” no auténticas, porque impide las relaciones recíprocas y el amor al prójimo. La “comunicación” entre las personas no es solo con palabras, sino también con gestos, con actitudes y hasta con silencios y ausencias; se comunica con todo lo que uno hace y dice.

Entonces, ¿qué es la verdad? Esta fue la pregunta que hizo Pilatos a Jesús en el proceso que lo llevaría a morir en la cruz. Jesús había afirmado: «Para esto he nacido y he venido al mundo, para dar testimonio de la verdad». Con su pasión y su muerte, demuestra que él mismo es la realización plena de la Verdad, pues su vida fue un reflejo de la relación con el Padre.

En su manera de vivir y morir, cada acto humano, por pequeño o grande que sea, afirma o niega esta verdad. «No dar falso testimonio, ni mentir», implica vivir como hijos de Dios, dejando que en cada acto se refleje que él es nuestro Padre y que confiamos en él.

16/11/18

15/11/18

solo habrá AMOR

PD1: En el cielo solo habrá el AMOR. La FE que ahora tanto pedimos, no será necesaria: estaremos viendo a Dios (acuérdate que nos hizo a su imagen y semejanza). La ESPERANZA tampoco, eso es para la Tierra: ya habremos llegado y no esperaremos nada más, el objetivo estará cumplido. Será todo CARIDAD, todo AMOR, verle, conocerle, estar con Él… Y eso será con nuestro cuerpo, que resucitará con nosotros, amando durante toda la eternidad, que entonces será mucho más fácil… Es por esto por lo que en esta vida terrena temporal nos debemos mover y mucho para alcanzar este objetivo del amor, debemos ir practicando...

14/11/18

¡qué poca fe!

PD1: Es curioso al leer el evangelio nos damos cuenta de la poca fe que tenían los apóstoles. El señor se lo echa en cara continuamente. Y eso que estaban con Él, que convivían con Él. Es un cierto alivio para nosotros hoy que, como ellos, debemos pedir que nos aumente la fe cada día…

13/11/18

+fe

PD1: Debiéramos tener más fe, aquella fe que no duda ante las dificultades y pruebas de la vida, y que sabe madurar en el dolor a través de nuestra unión con Cristo, tal como nos sugiere el papa Benedicto XVI en su encíclica Spe Salvi (Salvados por la esperanza): “Lo que cura al hombre no es esquivar el sufrimiento y huir ante el dolor, sino la capacidad de aceptar la tribulación…”

12/11/18

graitud, entusiasmo y confianza...

PD1: Esto es lo que debemos hacer y si lo olvidamos recordarlo continuamente: ''Recordad el pasado con gratitud, vivid el presente con entusiasmo y mirad hacia el futuro con confianza'', San Juan Pablo II.

8/11/18

la estuve canturreando todo el día

PD1: Ayer en Misa se cantó esa bonita canción: “…no alabéis a nadie, a nadie más que a Él…”, que se repite el estribillo varias veces. La estuve canturreando todo el día. Y de eso se trata de alabarle, de tenerle por encima de todo. De pasar del consumismo extremo del Black Friday, de no poner todo el interés en los regalos, en el consumo, y de meter al Señor en nuestro corazón a todas horas… De darle gracias continuamente por lo que nos cuida y nos quiere.

7/11/18

no juzgar a nadie, por nada...

PD1: ''Si juzgas a la gente, no tienes tiempo para amarla'', Santa Teresa de Calcuta.

6/11/18

lo que atrae, seduce y enamora...

PD1: Lo fácil aburre, lo difícil atrae, lo complicado seduce y lo imposible enamora. En la vida espiritual pasa un poco de lo mismo. Rezar el Rosario a veces aburre. Hay que buscar artimañas para salir de la repetición (cambiar entonación en una palabra, poner una intención en cada ave maría…). La oración mental muchas veces es muy difícil, hay mucho ruido fuera, y muchas cosas dentro. Pero cuando te habitúas a ella, te seduce y no puedes dejar de estar en oración un buen rato cada día con el Señor, acabar enamorado de Dios, poniendo un poco de esfuerzo y perseverancia. No, no es un imposible, sino algo muy alcanzable…

5/11/18

la castidad

PD1: ¿Por qué vivir la castidad?:

Jason Evert y Crystalina Padilla son dos novios que explican de forma sencilla sus razones para vivir la castidad, sin ningún complejo delante de las cámaras. Con su sesión “Amor sin Remordimiento” consiguen cautivar al público adolescente. Os recomendamos especialmente que entréis en su web y le echéis un ojo a las argumentaciones acerca de la castidad.

Te dejo el vídeo subtitulado y doblado en castellano para que te sea más fácil seguirlo: https://www.youtube.com/watch?time_continue=3&v=In2ZccckIy4

2/11/18

hacer cosas buenas

PD1: Hay muchos que están más cerca del Reino de Dios de lo que pensamos, porque hacen cosas muy buenas... Como dijo santa Teresita del Niño Jesús: «El Señor no me podrá premiar según mis obras (...). Pues bien, yo confío en que me premiará según las suyas». Menos compararnos con los demás, menos juzgarles, y más valorar lo bueno de cada uno.

31/10/18

y si empezamos por sonreír...

PD1: ''La revolución del amor comienza con una sonrisa'', Santa Teresa de Calcuta.

30/10/18

¿cómo evangelizar?

PD1: ''Practicar la caridad es la mejor manera de evangelizar'', ha dicho el Papa Francisco… El palabreo, el insistir con unos temas u otros, el intentar convencer no sirve de nada. Es nuestro ejemplo de amar al prójimo y a Dios lo que puede llegar a atraer…

29/10/18

generosidad

PD3: El Señor es inmensamente generoso con los que son generosos con Él.

26/10/18

enfermedades mentales

PD2: Hoy vivimos unos tiempos en que nuevas enfermedades mentales alcanzan difusiones insospechadas, como nunca había habido en el curso de la historia. El ritmo de vida actual impone estrés a las personas, carrera para consumir y aparentar más que el vecino, todo ello aliñado con unas fuertes dosis de individualismo, que construyen una persona aislada del resto de los mortales. Esta soledad a la que muchos se ven obligados por conveniencias sociales, por la presión laboral, por convenciones esclavizantes, hace que muchos sucumban a la depresión, las neurosis, las histerias, las esquizofrenias u otros desequilibrios que marcan profundamente el futuro de aquella persona.

«Convocando Jesús a los Doce, les dio autoridad y poder sobre todos los demonios, y para curar enfermedades» (Lc 9,1). Males, éstos, que podemos identificar en el mismo Evangelio como enfermedades mentales.

El encuentro con Cristo, que es la Persona completa y realizada, aporta un equilibrio y una paz que son capaces de serenar los ánimos y de hacer reencontrar a la persona con ella misma, aportándole claridad y luz en su vida, bueno para instruir y enseñar, educar a los jóvenes y a los mayores, y encaminar a las personas por el camino de la vida, aquélla que nunca se ha de marchitar.

25/10/18

saber perdonar

PD1: ''El perdón es una decisión, no un sentimiento, porque cuando perdonamos no sentimos más la ofensa, no sentimos más rencor. Perdona, que perdonando tendrás en paz tu alma y la tendrá el que te ofendió'', Santa Teresa de Calcuta.

Todos los días tenemos que perdonar a alguien, por tonterías, por pequeñas ofensas que nos hacen. Y mira que cada vez que rezamos un Padrenuestro lo decimos: “…como nosotros perdonamos a los que nos ofenden…”. Por eso el Señor cuando nos dijo cómo rezar hablo de esto y no de otras cosas…

24/10/18

Dios quiere nuestra felicidad

PD2: ¿Creemos en la predestinación, como creen otras religiones?. ¡No!: los cristianos creemos que Dios nos tiene reservado un destino de felicidad. Dios quiere que seamos felices, afortunados, bienaventurados. Fijémonos cómo esta palabra se va repitiendo en las enseñanzas de Jesús: «Bienaventurados, bienaventurados, bienaventurados...». «Bienaventurados los pobres, los compasivos, los que tienen hambre y sed de justicia, los que creerán sin haber visto» (cf. Mt 5,3-12; Jn 20,29).

Dios quiere nuestra felicidad, una felicidad que comienza ya en este mundo, aunque los caminos para llegar no sean ni la riqueza, ni el poder, ni el éxito fácil, ni la fama, sino el amor pobre y humilde de quien todo lo espera. ¡La alegría de creer! ¡La alegría después de amar, a todos!

23/10/18

constancia y perseverancia

PD1: El beato fray Gil de Asís, compañero de san Francisco, dijo: «Reza con fidelidad y devoción, porque una gracia que Dios no te ha dado una vez, te la puede dar en otra ocasión. De tu cuenta pon humildemente toda la mente en Dios, y Dios pondrá en ti su gracia, según le plazca».

Con constancia y perseverancia. Hemos de rezar sin desanimarnos nunca, aunque nos parezca que nuestra plegaria choca con un rechazo, o que no es escuchada enseguida. Hemos de confiar en que terminará por darnos lo que pedimos, porque además de ser amigo, es Padre.

Hemos de pedir sobre todo el Espíritu Santo y no sólo cosas materiales…

22/10/18

el domingo...

PD1: ¿Qué hiciste ayer? Recuerda que los domingos son los días del Señor…

19/10/18

hacer el bien

PD1: Cuando practicamos el bien, pensamos que lo hacemos por el prójimo, pero realmente también lo hacemos por Cristo: «Os aseguro que todo lo que hicisteis por uno de los más pequeños de estos mis hermanos, a mi lo hicisteis» (Mt 25,40). Y mi prójimo, dice Benedicto XVI, es cualquiera que tenga necesidad de mí y que yo pueda ayudar. Si cada uno, al ver al prójimo en necesidad, se detuviera y se compadeciera de él una vez al día o a la semana, la crisis disminuiría y el mundo sería mejor. «Nada nos asemeja tanto a Dios como las obras buenas» (San Gregorio de Nisa).

18/10/18

Dios no puede llenar lo que está lleno de otras cosas

PD1: En nuestro mundo consumista, tenemos tantas cosas que podemos caer en la tentación de creer que nos otorgan seguridad, que nos sostiene una gran cuerda. Pero, en realidad, igual que los “pobres”, estamos colgando de un hilo. Decía la Madre Teresa: «Dios no puede llenar lo que está lleno de otras cosas». Tenemos el peligro de tener a Dios como un elemento más en nuestra vida, un libro más en la biblioteca; importante, sí, pero un libro más. Y, por tanto, no considerarlo en verdad como nuestro Salvador.

16/10/18

suscitar la libre adhesión

PD1: La proclamación del Evangelio es una tarea «que no podrá ser delegada a unos pocos “especialistas”» (San Juan Pablo II): todos estamos llamados a esta tarea y todos nos hemos de sentir responsables de ella. Cada uno desde su lugar y condición. El día del Bautismo se nos dijo: «Eres Sacerdote, Profeta y Rey para la vida eterna». Hoy, más que nunca, nuestro mundo necesita del testimonio de los seguidores de Cristo.

«La mies es mucha, y los obreros pocos» (Lc 10,2): es interesante este sentido positivo de la misión, pues el texto no dice «hay mucho que sembrar y pocos obreros». Quizá hoy debiéramos hablar en estos términos, dado el gran desconocimiento de Jesucristo y de su Iglesia en nuestra sociedad. Una mirada esperanzada de la misión engendra optimismo e ilusión. No nos dejemos abatir por el pesimismo y por la desesperanza.

De entrada, la misión que nos espera es, a la vez, apasionante y difícil. El anuncio de la Verdad y de la Vida, nuestra misión, no puede ni ha de pretender forzar la adhesión, sino suscitar una libre adhesión. Las ideas se proponen, no se imponen, nos recuerda el Papa.

15/10/18

disposición del corazón

PD1: “La santidad consiste en la disposición del corazón”, dijo Santa Teresa de Lisieux. Es querer las cosas de Dios, tratarle, sabernos sus hijos queridos, trasmitir a otros su amor… Ofrecerle todo lo que hacemos, pedirle perdón, estarle agradecidos por todo lo que nos da, querer a los demás… En definitiva, tenerlo en nuestro corazón, sacando las cosas materiales que no nos llenarán nunca.

11/10/18

la conversión...

PD2: La conversión consiste en que el amor supere progresivamente al egoísmo en nuestra vida, lo cual es un trabajo siempre inacabado…

10/10/18

mal humor

PD1: "La tristeza a veces se expresa con mal humor." Hay que preguntarse de vez en cuando por qué estamos tristes… Y poner remedio en cuanto identifiquemos el problema. La alegría de los cristianos, fruto de la fe, es el mejor remedio, la esperanza…, el darnos a los demás y no pedir nada a cambio, generosamente…

9/10/18

hijos pequeños de Dios

PD1: “El hecho de sentirnos hijos pequeños de Dios nos facilita tener el corazón abierto hacia todos y crecer en la paz, la alegría y el agradecimiento.” Estas enseñanzas le han valido a santa Teresita de Lisieux el título de “Doctora de la Iglesia”: en su libro Historia de una alma, ella admira el bello jardín de flores que es la Iglesia, y está contenta de saberse una pequeña flor. Al lado de los grandes santos, rosas y azucenas, están las pequeñas flores, como las margaritas o las violetas, destinadas a dar placer a los ojos de Dios, cuando Él dirige su mirada a la tierra…

Es así de simple, tratar de ser una simple margarita, para que cuando Dios nos mire se alegre…

8/10/18

la libertad...

PD1: Qué misterio, el de la libertad humana! Podemos decir “no” a Dios... El mensaje evangélico no se impone por la fuerza, tan sólo se ofrece y yo puedo cerrarme a él; puedo aceptarlo o rechazarlo. El Señor respeta totalmente mi libertad. ¡Qué responsabilidad para mí el poder elegir!

5/10/18

¡buen humor!

PD1: "La tristeza a veces se expresa con mal humor". Y de Perogrullo, la alegría que mostramos los cristianos, gracias a la fe que tenemos, dentro de un claro mensaje de optimismo vital que vivimos, se debe trasmitir con un muy buen humor, con mucha simpatía… Hay que sonreír, en todo momento, ser simplemente encantador, que la gente nos vea muy atractivos y no malhumorados…, asequibles.

4/10/18

hay que imprimirla si no la sabes...

PD1: Estas son las oraciones que Francisco nos ha animado a rezar al final del Rosario, durante este mes mariano de octubre. ¿El objetivo? Pedirle a Nuestra Madre y al Arcángel san Miguel que defiendan a la Iglesia del diablo.

2/10/18

ángel de la guarda

PD2: Hoy es el día del "ángel de la guarda", de los Santos Angeles Custodios que todos tenemos, que están pendientes de nosotros en todo momento. San Josemaria decía que cuando hablaba con alguien, antes le decía a su ángel de la guardia que le echara una mano… No se ven, pero ahí están para que les pidamos ayuda en lo que necesitemos.

1/10/18

prioricemos nuestro tiempo...

PD2: Nunca tenemos tiempo para nada… No priorizamos lo más importante, nos come el día a día… Y para Dios, le dejamos las migajas, ¡qué pena!

“I didn’t have time”

This actually means, "it wasn't important enough." It wasn't a high priority, fun, distracting, profitable or urgent enough to make it to the top of the list.

Every few days, Twitter and Facebook soak up a billion hours of 'spare' time. Where did that time come from? What did we do before social media was here? Weren't we busy five years ago?

Running out of time is mostly a euphemism, and the smart analyst realizes that it's a message about something else. Time is finite, but, unlike money, time is also replenished every second.

The people you're trying to reach are always recalibrating which meetings they go to, which shows they watch, which books they don't read. The solution has nothing to do with giving people more time (you can't) and everything to do with creating more urgency, more of an itch, more desire.

28/9/18

somos Hijos de Dios

PD2: El sabernos Hijos de Dios nos da mucha tranquilidad y paz. No estamos solos en este mundo. Tenemos nuestra familia, padres, hermanos, hijos, amigos… Pero, sobre todo, le tenemos a Él que nos mima, nos acoge, nos perdona, que nos quiere a cada uno en especial, a todos, a los que le corresponden y a los que no. Mandó al Señor para salvarnos y no nos abandona nunca, se quedó con nosotros en la Eucaristía. Vivimos pensando que todo lo podemos nosotros solitos, cuando estamos en sus manos y Él nos provee. Con nuestro esfuerzo sólo, nada alcanzaríamos. Tenemos toda la libertad, que nos dio, pues nunca nos abandona, es nuestro Padre y somos sus hijos.

27/9/18

vivir en paz

PD1: ¿Quién no desea vivir en paz?

Esto es lo que puedes hacer tú por la paz en el mundo

La paz mundial comienza por una paz interior. Seamos pues generadores de paz

¿Quién no desea vivir en paz? Hacemos todo y de todo con tal de experimentar ese tan ansiado estado interior. Hasta cruzamos océanos para llegar a esos majestuosos lugares lejanos que nos transmitan sosiego, tranquilidad, armonía…

A veces es tantísima nuestra necesidad por sentirla que hasta caemos en lo absurdo creyendo que la podemos comprar o llegar a hacerla nuestra por medio de agentes externos como los cuarzos y todas esas cosas esotéricas que tan de moda están hoy en día. ¡Peligrosísimo!

Si tan solo entendiéramos y, sobre todo, aceptáramos que está tan al alcance de nuestra mano y que sentirla no cuesta un solo centavo.

La verdadera paz interior es fruto del Espíritu Santo. Cuando nuestra alma corresponde con docilidad a sus inspiraciones produciremos actos de virtud y frutos como la paz. Esto quiere decir que forzosamente necesitamos tener una disposición interior y cooperar ascéticamente para vivir virtuosamente.

El estado interior en el que tú y yo elijamos vivir será el que generemos a nivel, no solo familiar, sino mundial porque tanto el amor, la paz, la alegría, así como el mal humor y el odio se transmiten.

Entonces si de verdad queremos vivir en un mundo con paz necesitamos comenzar por tener paz interior de forma personal. Necesitamos ser como la luz del sol que los girasoles buscan porque la necesitan. Seamos de esas personas que a los demás se les antoje estar cerca de nosotros porque les transmitimos tranquilidad y todo aquello que provoca la serenidad.

¿Cómo puedes ser generador de paz?

+Reza, medita, platica con Dios. Cada mañana date unos minutos a solas con Él y por medio del silencio escucha su voz y permite que te llene de su paz.

+Detente a pensar antes de hablar, de escribir y de actuar. Es decir, reflexiona en lo que puedes generar con tus palabras al decir tal o cual cosa, al escribir ese mensaje o al actuar de aquella manera. Es importante que recapacites en cómo te sientes en ese momento. Si te sientes irritado seguramente vas a transmitir esa emoción y no generarás paz.

+Sé muy cuidadoso con lo que compartes en tus redes. El botón de “compartir” no manda ningún foco rojo o señal de ¡alerta! así que sé muy prudente a la hora de apretarlo. Sé delicado con los mensajes que escribes; con las noticias y las fotos que compartes o reproduces. Aquí también es importante que te detengas a pensar en qué es lo que puedes generar: paz, esperanza o intranquilidad, pesimismo, angustia.

+Genera buenas noticias y compártelas. ¡Y evita las malas! Trata de ser solo portador de buenas nuevas. Es muy triste que estas difícilmente se reproducen, pero las otras… ¡Uf! Como virus se propagan.

Vivir en paz no significa ausencia de problemas, sino esperanza en el Creador; certeza de que tras una noche oscura siempre sale el sol. Por lo tanto, cuando pases por un momento difícil que te pueda hacer perder tu paz interior invoca el Nombre de Dios y dile: “Dame esa paz que solo tú me puedes dar”, respira y a enfrentar la vida como venga, siempre en paz.

La paz es contagiosa. Elegir todos los días, a pesar de las circunstancias, vivir en ese estado, ser generadores de paz y no de odio; de esperanza y no de pesimismo. Sobre todo, en esta época en que las redes sociales se pueden convertir en eso, en fuentes de concordia y conciliación o, todo lo contrario. ¡La paz también puede hacerse viral!

26/9/18

la felicidad...

PD1: Todos queremos ser más felices. La felicidad es lo que más nos preocupa alcanzar y lo que vamos buscando con nuestra conducta, con las cosas que hacemos… Y sí, el dinero no te la da, ni mucho menos. Si sabes inglés, te recomiendo este video… La felicidad en un 50% es genética (ya sabes lo mucho que quiero a los siesos). Aunque también hay que estar proactivo, hay que hacer cosas para conseguirla, tomar decisiones, cambiar lo que hacemos mal, tratar de adquirir buenas costumbres. Y sobre todo, la fe, la familia, ser caritativo y la satisfacción por el trabajo…, por hacer bien las cosas.

25/9/18

hacer felices a los que nos rodean...

PD2: En el alma de cada cristiano, Jesús ha sembrado, por el Bautismo, la gracia, la santidad, la Verdad... Hemos de hacer crecer esta semilla para que fructifique en multitud de buenas obras: de servicio y caridad, de amabilidad y generosidad, de sacrificio para cumplir bien nuestro deber de cada instante y para hacer felices a los que nos rodean, de oración constante, de perdón y comprensión, de esfuerzo por conseguir crecer en virtudes, de alegría...

24/9/18

la esperanza ante la muerte

PD2: San Braulio de Zaragoza dijo: “La esperanza de la resurrección debe confortarnos, porque volveremos a ver en el cielo a quienes perdemos aquí”. Por eso cuando vas al tanatorio a consolar a un fallecido, si es cristiano, la gente reza por el fallecido, por sus buenos recuerdos, pero no hay tanta pesadumbre, como cuando ves lo desolados que se quedan los familiares de los no creyentes…

21/9/18

leer el evangelio con humildad

PD1: Con respecto a leer el evangelio todos los días, hay que hacerlo no con el afán de conocer la historia, sino leyendo un rato corto cada día, meditando las palabras, metiéndonos en ese momento, que Dios nos habla a nosotros ahora, no a esos judíos de entonces… Hemos de dejar que la Palabra de Dios llegue a nuestro corazón y nos convierta, dejar cambiarnos, transformarnos con su fuerza. Pero para eso hemos de pedir el don de la humildad. Solamente el humilde puede aceptar a Dios.

20/9/18

el noviazgo

PD1: Tengo un hijo que se acaba de ennoviar, así que esto va para él…

¿Quieres tener éxito en el noviazgo? Cultiva estos valores

Descubre qué actitudes llevan a una relación profunda, sincera y llena de respeto

En algún momento de nuestra vida nos descubrimos ilusionados y cautivados por una persona en especial. Podemos afirmar que nada se compara con la presencia de “ese alguien” y nuestro cariño se fortalece en la medida que encontramos correspondencia a las atenciones y detalles que mutuamente se procuran en pareja.

Lamentablemente, pocas son las parejas que pudieran servir de modelo para ilustrar como debe vivirse el noviazgo. Los más nobles sentimientos parecen estar sometidos a unos cuantos encuentros casuales, al placer sensual, a rendir nuestro juicio y voluntad a las exigencias de la otra persona. Tal vez la modernidad propone una vida sin compromisos, donde a final de cuentas lo importante es “pasar un buen rato”…

El noviazgo es sinónimo de correspondencia y afinidad, ¿pero en qué? Primeramente en valores, sentimientos, intereses, gustos, aficiones… Eso es lo importante. La atracción física y la diversión son los elementos decorativos de una relación profunda, pero nunca el motivo de unión y de entrega absoluta.

Si deseamos que el noviazgo sea un medio para el desarrollo individual y el crecimiento como pareja, es necesario poner en práctica algunos valores necesarios e importantes para lograr este objetivo:

Respeto

Siempre se habla de respetar ideas, gustos, hábitos y costumbres, pero eso no significa estar de acuerdo con todo, o permanecer indiferentes. Muchos de estos aspectos pueden no parecernos e incluso disgustarnos y lo correcto será ayudarse mutuamente a corregirlos. Recordemos que cuando existe un interés y cariño auténticos, siempre se buscará el bien de la otra persona.

El respeto en pareja también debe vivirse en las manifestaciones de cariño: caricias, abrazos, besos e incluso palabras. ¿Cómo saber que estamos actuando correctamente? Alguien decía a una joven pareja: “Cuando estén a solas, compórtense de la misma manera que si estuvieran delante de sus padres o de otras personas; así no se equivocarán, ni cometerán una imprudencia”.

Con nuestro digno comportamiento, también demostramos respeto por nuestros padres, la familia y todos los principios morales recibidos en casa, la escuela y la religión.

Decencia

En el noviazgo siempre es necesario evitar todo aquello que sea provocativo: ropa, posturas, caricias, palabras y hasta algunos tipos de baile. Estos son recursos que utilizan las personas para aprovecharse de la situación y lo único que buscan es una relación pasajera. Si deseas que te tomen en serio y te aprecien de verdad, evítalas; así no darás la impresión de ser una “persona fácil”. También es conveniente tener un horario adecuado para salir, pues siempre habrá murmuraciones respecto a las parejas trasnochadoras.

Después de todo, cualquier persona prefiere entablar una relación seria con alguien que viva este valor, pues no existe nada en su conducta que sea reprochable, ni rumores ni calumnias, solo comentarios positivos. El comportarse decentemente garantiza tu buena fama.

Sana Diversión

Uno de los más grandes peligros que existen en los noviazgos es la búsqueda constante de nuevas diversiones. Lo más difícil es encontrar actividades que nos permitan vivir los valores y conducirnos con respeto.

La ociosidad y la falta de prudencia en pareja constituyen la causa de todos los desaciertos que se cometen. Por eso ayuda mucho el asistir a lugares públicos con adecuada iluminación; participar en actividades de conjunto; platicar en casa o ver películas a puertas abiertas, además de cerciorarse que alguna otra persona se encuentra en el lugar; tener alguna afición: deportes, música, pintura, colecciones; utilizar el auto para transportarse y no como “refugio” para tener cierta intimidad.

Conviene recordar que los lugares y actividades donde circula el alcohol, drogas o prevalece un ambiente sensualdisminuye nuestra capacidad de autodominio; por lo tanto, no deben considerarse como la mejor opción para divertirse.

Autoestima

En apariencia la autoestima en un valor egoísta, donde proteger nuestro yo íntimo es lo más importante para no salir lastimados. Pero la realidad es que la autoestima nos permite descubrir todo lo bueno que tenemos(cualidades, habilidades, hábitos), así como nuestros defectos. Esto nos permite desarrollar nuestras cualidades y buscar la manera de superar nuestras fallas. El conocimiento propio nos brinda seguridad y confianza, tomando conciencia del valor que como personas tenemos.

Cuando la autoestima está bien fundamentada, se aprende a aceptar los consejos y críticas para mejorar nuestra persona: modales, vocabulario, forma de vestir, disposición al trabajo o al estudio, relación familiar, etc. Pero también nos ayuda a defender nuestros principios moralesrechazar la manipulación de nuestras ideas y sentimientos para ceder a los caprichos de otra persona, sea cambiando nuestra conducta, creencias, amistades o donar nuestro cuerpo por temor a perder “ese cariño”.

A pesar del dictado de nuestros sentimientos, la autoestima nos permite abandonar una relación que no prospera por las discusiones, la falta de entendimiento y de respeto, o que definitivamente nos impide comportarnos con dignidad.

Compromiso

¿Compromiso en el noviazgo? Esto sí que es novedad. Aunque parezca exagerado y fuera de contexto, no debería extrañarnos hablar de este valor si lo consideramos como elemento indispensable para desarrollar nuestra personalidad.

La formalidad en nuestra conducta nos lleva a cumplir lo mejor posible los compromisos adquiridos, esto es, corresponder a la confianza depositada, demostrar que nuestra palabra empeñada vale tanto o más que un contrato escrito, vivir la sinceridad evitando la mentira y la doble personalidad, discretos para no revelar las confidencias recibidas… ¡Lo mismo que en un trabajo profesional, con los amigos o en familia! Ese es el primer compromiso que tenemos: ser honestos con nosotros mismos para poder cumplir íntegramente con los demás..

En todas las relaciones humanas hace falta comportarse con madurez y seriedad; el noviazgo no es una relación de segunda categoría por ser una “relación informal”. Esto significa evitar jugar con los sentimientos de la otra persona, engañar a varias a la vez o buscar la compañía para cuando no haya algo mejor que hacer.

De alguna manera, al vivir lo mejor posible nuestro noviazgo nos estamos preparando para adquirir mayores compromisos, como puede ser el matrimonio. Lo cierto es que la falta de compromiso en cualquier actividad o relación, termina por llevarnos a la superficialidad, la apatía y la trampa… ¿Se puede confiar en alguien así?

Esto no quiere decir que al tener una pareja debemos permanecer “atados” indefinidamente. Se trata de poner en orden nuestros intereses, planes, actividades y sentimientos, para encontrar el momento justo y la persona adecuada para emprender una relación. Comportarse de esta manera nos da personalidad, madurez y calidad humana.

Devolver el encanto al noviazgo es algo más que ver la vida color de rosa, es recuperar el respeto y la dignidad de hombres y mujeres, convirtiéndose en personas con la capacidad de formar una familia que vive y transmite valores humanos a la sociedad.

19/9/18

¿crisis de fe?

PD1: Si hay un problema con la fe, hay que actuar…

Estoy viviendo una crisis de fe, ¿qué hago?

Enfermedades, divorcios, sufrimientos y desempleo pueden ser algunas de las tentaciones que el enemigo utiliza para hacer que las personas duden de la acción amorosa de Dios

La fe del cristiano es la gasolina que hace trascender los obstáculos y permanecer firme en Dios. Cada ser humano enfrenta luchas y sufrimientos, pero existe una diferencia entre el creyente y el no creyente: el sentido de la existencia humana.

El cristiano cree que, tras vivir las pruebas terrenales, en Dios él será recompensado con la salvación eterna. La vida sin fe conduce a la persona a la pérdida del sentido de su existencia.

En la Palabra de Dios, se encuentra la siguiente definición: “La fe es aferrarse a lo que se espera, es la certeza de cosas que no se pueden ver”(Hb 11,1). Es decir, la persona espera, con una certeza que no tiene explicación humana, algo que no es palpable.

El Catecismo de la Iglesia católica, párrafo 153, afirma: “La fe es un don de Dios, una virtud sobrenatural infundida por Él”. Por lo tanto, es un regalo del Señor a sus hijos, es el camino que conduce al hombre a Dios.

Si la fe es esencial para alcanzar el cielo, entonces, el enemigo hará lo que sea para arrancarla de las personas.

“La fe puede ser puesta a prueba. El mundo en que vivimos parece con frecuencia muy lejos de lo que la fe nos asegura; las experiencias del mal y del sufrimiento, de las injusticias y de la muerte parecen contradecir la buena nueva, pueden estremecer la fe y llegar a ser para ella una tentación (CIC 164).

Enfermedades, divorcios, sufrimientos y desempleo pueden ser algunas de las tentaciones que el enemigo utiliza para hacer que las personas duden de la acción amorosa de Dios.

Al ser así, se inicia un proceso de alejamiento del Señor, experimentándose una crisis de fe en la que la existencia de Dios es cuestionada.

Pasos para superar la crisis

Primero: Pide ayuda a personas que estén maduras en la fe, como un sacerdote, un director espiritual o alguien que sea un referente para ti. Sé muy transparente y libre en tus cuestionamientos, ábrete a escuchar sus consejos.

Segundo: Sal de la escena para vivir, tras bastidores, el combate espiritual. Para quien es líder en la Iglesia, puede ser un tiempo de ceder el “cargo” para que otra persona ejerza su “función”, mientras tú pasas por la crisis. No es dejar de vivir las prácticas religiosas ni las actividades misioneras, sino cuidarse, para que la lucha contra el enemigo no sea desleal.

Tercero: Cuenta con el apoyo de las personas que, realmente, te aman y no te juzgan. Es una crisis que pasará, y si fuera bienvenida, producirá buenos frutos de salvación. Deja que las personas hablen lo que quieran, no te dejes llevar por los comentarios y juicios, sino comprende que, al final, tu juicio será entre Dios y tú.

Cuarto: Es importante comprender que Dios jamás violará las leyes humanas y la libertad que Él mismo les ha dado a sus hijos.

Por ejemplo: para que la enfermedad sea curada, es necesario que el tratamiento pedido por los médicos se haga. Si Dios quisiera curar instantáneamente, es misterio de fe. Es importante, sin embargo, que el enfermo, en su libertad, escoja hacer todo el proceso solicitado por los médicos.

Dios me ama y consuela

Mediante todas las oraciones no atendidas y las luchas vividas, ten la certeza de la fe: Dios te ama y consuela.

La madurez en la fe sucede cuando nosotros creyentes aprendemos que Dios no está obligado a hacer nuestras voluntades a la hora que queremos.

Lo que necesitamos es el amor y el consuelo de Él, pues “el justo vivirá por la fe” y “los que tienen fe para la preservación del alma.” (Hb 10,38-39)

18/9/18

mi libertad...

PD1: Dios insinúa y espera…, respeta mi libertad.

¿Por qué Dios no es más claro?

No presiona, no fuerza, espera, respeta, insinúa, seduce... y así es mejor

No creo que Dios sea un Dios de piedra que no actúa. No quiero pensar en un Dios que sólo me mira desde lejos y no hace nada al verme tropezar. No me gusta pensar en un Dios que no tira de mí y no me lleva en sus brazos.

Sé, tengo esa certeza: Dios actúa en mi vida. No permanece ausente y lejano viéndome tropezar.

Es mi Dios un Dios que me llama por mi nombre. Resuena su voz en mis entrañas. Y me dice que me ama.

Tengo claro que las decisiones que tomo en mi vida siempre tienen consecuencias. A veces me gustaría que no fuera así. Actuar a mi manera sin sufrir nada negativo. No es así. Decido, actúo y no siempre sale todo como yo quiero.

En mi vida siempre ha sido así. He tomado algunos caminos, he dejado otros. He acertado, me he confundido. Pero siempre mi Dios ha estado a mi lado. Nunca se ha desentendido.

Mi Dios no es un Dios mudo. Me habla, me insinúa posibles soluciones, o respuestas y me muestra cuáles son sus deseos, ese plan que me va a hacer más pleno y feliz. Pero me deja libre. No presiona, no fuerza, espera, respeta, insinúa, seduce.

Esa forma de actuar no es la mía. Yo no tengo tanta paciencia. No dejo actuar con tanta libertad. Quiero que se hagan las cosas como yo deseo. No me gusta sufrir. No quiero el dolor ni la prueba.

La prueba, el obstáculo y la dificultad constituyen un momento de verdad de los deseos. Mientras que, por el contrario, la ausencia de dificultades y una vida demasiado cómoda y tranquila no ayudan a hacer realidad el deseo, sino que, paradójicamente, hacen que se extingan las ganas de vivir[1].

Me hace más fuerte el camino que sigo. Creo más en sus planes que en los míos.

A veces creo saber lo que les conviene a aquellos a los que amo. Tal vez porque pienso que no saben lo que les conviene. Creo que no son capaces de decidir bien y quisiera yo decidir por ellos. Marcarles el camino, evitar sus posibles caídas.

Siempre recuerdo una película de ciencia ficción, Minority Report. En ella algunas personas nacían con una sensibilidad especial para ver el futuro. Sabían lo que iba a suceder. Se llamaban Precogs.

Con ese conocimiento la policía podía evitar muchos crímenes. Se podría así vivir en una sociedad sin mal. Todo se podía evitar mucho antes de que fuera a ocurrir.

A veces pienso que me gustaría tener ese conocimiento previo de la realidad. Así evitaría traspiés, y no caería en las redes de la tentación. No tomaría decisiones equivocadas. ¿Acertaría siempre?

Hay tanto miedo hoy a no acertar con la decisión. Hay personas que pretenden evitar el crimen mucho antes de que ocurra. No se fían, ponen demasiados límites y actúan impidiendo actuar.

Hay muchos padres que sufren con las decisiones inciertas de sus hijos. Temen por sus caídas. Les gustaría evitarles cualquier mal.

Me gustaría ser un poco así. Un poco como Dios. Con poder para intervenir y lograr siempre el objetivo marcado. Un Dios que actúa, que no se mantiene ausente. Un Dios capaz de hacer el bien, no un Dios impotente.

Esa imagen de Dios pasivo atormenta a tantas personas. No evita el mal, no salva a un ser querido, no hace posible lo que sueño y deseo. ¿No decía que me amaba?

Un Dios así puede cansarme o lograr que no lo ame. ¿Cómo se puede amar a alguien al que no le intereso? ¿Dónde está ese Dios que me lleva de la mano, o me sujeta en la palma de su mano?

Es un Dios sin capacidad para intervenir. No logra parar el mal. Esta imagen de Dios me quita la paz. No es mi Dios. El mío me habla muchas veces con palabras, con silencios, a través de personas, a través de sucesos.

Creo en ese Dios que incendió mi corazón con una pregunta vocacional que yo antes no tenía. Me hizo decir sí en una tarde de lágrimas.

Creo en ese Dios que camina a mi lado, corre, se detiene, abrazándome cuando dudo. Creo en ese Dios al que no decepciono nunca. Porque no espera que lo haga todo perfecto. Sabe cómo soy y ha puesto en mi camino personas y lugares donde reposar mi alma.

Creo en ese Dios que me quiere como soy, sin quitar de mí nada de lo que a mí me estorba. No ha evitado mis crímenes. No ha sujetado mis pies antes de la caída, ni mi mano antes del golpe. No ha apagado mis gritos que han herido. Ni ha calmado mis ansias en decisiones irresponsables.

Me hubiera gustado una mano deteniéndome a la puerta del pecado, del abismo. O un Dios fuerte sujetando mis arranques llenos de ira.

Pero se mantuvo quieto a mi lado, esperando. Respetando mi libertad más sagrada. Y así creo que ha sido mejor.

No ha evitado los crímenes que pudo prever porque lo sabía ya todo. No me ha soltado cuando la cruz ha herido mi piel tan frágil.

He notado su aliento cerca de mí cuando intenté alejarme. Me ha dado la esperanza como alimento diario. Una risa fácil para no ponerme tan serio, ni tan denso, ni tan crispado.

Me ha despertado de mis sueños de vanidad cuando mi ego ha crecido demasiado. Ha tejido en mi alma un lugar de luz en el que vivir tranquilo en medio de mis luchas. Un lugar lleno de fuego y calma al mismo tiempo.

Miro mi historia sagrada y doy gracias. Dios ha estado conmigo.

Como dice san Francisco de Sales: “Si todos los ángeles, todos los genios del mundo, hubiesen estudiado qué sería más útil en tal o cual situación, o de qué serviría este sacrificio o aquel sufrimiento, esta tentación o aquella pérdida dolorosa, no habrían podido encontrar nada más conveniente para ti que lo que te ocurrió”[2].

Creo en ese Dios que ha tejido conmigo mi historia. Ese Dios que me ha hablado y lo sigue haciendo. No siempre lo entiendo. Creo en ese Dios que me ama con locura. No siempre lo siento. Creo en ese Dios que ha actuado en mi vida. No siempre lo he visto.

[1] Giovanni Cucci SJ, La fuerza que nace de la debilidad

[2] J. Kentenich, Conferencias de Sión