PD1: Como todos los martes, ayer me volví a confesar. El pasado viernes me tomé un sándwich de jamón de york de merienda como todos los días. No caí en que estábamos en Cuaresma. Me pesó cuando me di cuenta. El cura me dijo que si no había sido intencionado no pasaba nada, no era pecado. Pero que, quizás, el no darme cuenta de que era Cuaresma era peor. Estos 40 días son para rezar más, dar limosna y mortificarnos. Son días de conversión… La vida se nos pasa volando sin percatarnos de casi nada. Así que me sirvió mucho lo que me dijo en el confesionario para ponerle remedio. Tengo que rezar más y convertirme.
1/3/23
me tuve que confesar por un sandwich de jamón
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