9/10/18

hijos pequeños de Dios

PD1: “El hecho de sentirnos hijos pequeños de Dios nos facilita tener el corazón abierto hacia todos y crecer en la paz, la alegría y el agradecimiento.” Estas enseñanzas le han valido a santa Teresita de Lisieux el título de “Doctora de la Iglesia”: en su libro Historia de una alma, ella admira el bello jardín de flores que es la Iglesia, y está contenta de saberse una pequeña flor. Al lado de los grandes santos, rosas y azucenas, están las pequeñas flores, como las margaritas o las violetas, destinadas a dar placer a los ojos de Dios, cuando Él dirige su mirada a la tierra…

Es así de simple, tratar de ser una simple margarita, para que cuando Dios nos mire se alegre…

No hay comentarios:

Publicar un comentario