29/5/20

Paz!!!

PD1: Paz!!!! Es lo único que pido, que haya paz, que no sigamos con esta escalada de odio y de resentimiento. Que vuelvan las viejas costumbres perdidas, que vuelva algo de armonía...

Todos los días en la Misa pedimos por los gobernantes para que se inspiren y apliquen con justicia lo que necesitan los ciudadanos. Lo mismo que en las familias, cuando tratamos de manera desigual a los hijos en función de sus necesidades…

Verdad!!! Es la segunda derivada. Si proliferara la verdad tendríamos más paz. En este mundo nuestro de continuas mentiras, las personas se enojan cuando ven que nos van mintiendo continuamente. Que nos digan la verdad, que no nos traten como a niños pequeños.

Nosotros en casa siempre hemos dicho la verdad y no hemos tratado de ocultar la realidad, ni les hemos mentido a los niños cuando eran chicos…

28/5/20

DEP

PD2: Por fin hay luto, tras tantos muertos, tras tantos números anónimos:

27/5/20

hablar con Dios

PD1: Hacer oración no es informar a Dios, sino pedirle todo lo que necesito, ya que «vuestro Padre sabe lo que necesitáis antes de pedírselo» (Mt 6,8). No seré buen cristiano si no hago oración, como no puede ser buen hijo quien no habla habitualmente con sus padres.

Y es que los hijos, cuando hablan con sus padres, no lo hacen con razonamientos complicados, ni diciendo muchas palabras, sino que con sencillez piden todo aquello que necesitan. Siempre tengo la confianza de ser escuchado porque Dios, que es Padre, me ama y me escucha…

26/5/20

servir como medio de amar

PD1: Servir es la mejor forma de amar. Darnos cada día por los otros. Ayudarles en lo que necesitan. Rezar por los demás para su conversión, no solo por sus necesidades materiales.

Y servir también es una forma de vida. Lo hacen los ateos muchas veces mejor que los cristianos. Hay que aprender mucho de esas personas que son bondadosas y sirven siempre a los demás seres humanos, con una gran generosidad.

Pero la mejor forma de amar al resto es empezar por nuestro entorno más próximo, por nuestra casa. Servir a cada uno en lo que podamos…

25/5/20

ya hay culto en las iglesias...

PD1: Por fin nos liberan los bares y restaurantes en Madrid, aunque sea un tercio y solo las terrazas. ¿Estarán llenas hasta los topes? Supongo que sí… Tengo a mis hijos como locos por irse de cañas. Yo soy poco de bar, ni desayuno en ellos, ni me tomo una caña, no me gusta la cerveza, ni me molan las tapas de los bares…

Este fin de semana, que había culto en las iglesias, esperábamos un llenazo total. A la que fuimos nosotros, tanto el sábado por la tarde como el domingo, estaba desolada. ¿Por qué? Supongo por miedo todavía, por la falta de costumbre, por la pérdida de los buenos hábitos. Así que si quieres ir a Misa el domingo que viene no te asustes que puede que estén más vacías que los bares. Aprovechamos a dar gracias a Dios de que estemos vivos y hayamos superado esto, por ahora…, y rezamos por los fallecidos y sus familias.

21/5/20

comulgar...

PD1: “Comer para vivir”: comer la carne del Hijo del hombre para vivir como el Hijo del hombre. Este comer se llama “comunión”. Es un “comer”, y decimos “comer” para que quede clara la necesidad de la asimilación, de la identificación con Jesús. Se comulga para mantener la unión: para pensar como Él, para hablar como Él, para amar como Él…

20/5/20

he comulgado!!!

PD1: No te he contado, hemos vuelto a ir a Misa cada día y ha sido muy emocionante volver a comulgar. Habíamos asistido a la Misa por Internet, pero no es lo mismo. Ahora, recibir al Señor sacramentalmente, es cuando recibimos las fuerzas de verdad… He dado muchas gracias por la buena familia que me ha concedido, por la salud, por habernos librado del confinamiento… Y he pedido para una pronta recuperación de la economía, que saque de la miseria a tantos. También, como todos los días, he pedido por las víctimas y sus familiares, para que consigan pronto el consuelo de saber que sus seres queridos puedan descansar en Paz.

19/5/20

gracias a los dos...

PD1: Me encanta. Hoy haré una gran acción de gracias por los dos…

18/5/20

Wojtila

PD1: Este fin de semana hemos visto la película Wojtila, la de San Juan Pablo II que no se pudo estrenar en los cines y la puedes alquilar en Internet.
Mis hijos no conocieron a este papa santo, así que tuvimos oportunidad mi mujer y yo de ampliarles cosas que salían en la película: su manera de rezar todo el día, su sonrisa, su mirada que te llevaba puesto…
Le vimos muchas veces, en España y en los telediarios cada vez que se movía. Pero lo que creo que destacó de su pontificado fueron:
  • La enorme capacidad de conversión que provocaba. Cambió de la iglesia hundida tras el Concilio, la hizo revivir.
  • Su ejemplo de cómo estar en presencia de Dios a todas horas, de enseñarnos a rezar.
  • La Misericordia con los demás, con todos.
  • La santidad: todos sus años de papa no dejó claro que se puede intentar en alcanzar la santidad.
  • Desde entonces me dedico a regalar sonrisas como hacía San Juan Pablo II, a mirar a la gente con sus ojos, a tratar de amar a los demás como él nos enseño…

14/5/20

la oración es un grito del corazón...

PD2: Otra vez el Papa Francisco diciendo las cosas muy claras: “La oración es la respiración de la fe, es como un grito que sale del corazón de quien cree y se encomienda a Dios. Fe es tener dos manos alzadas y una voz que grita implorando el don de la salvación.”

13/5/20

no es tan difícil

PD1: El Evangelio no es una ley que nos oprime. Alguna vez hemos podido caer en la tentación de pensar que los que no son cristianos están más tranquilos que nosotros y hacen lo que quieren, mientras que nosotros tenemos que cumplir una lista de mandamientos. Es una visión de las cosas meramente superficial.

Personalmente, una de mis mayores preocupaciones es que el Evangelio se presente siempre como una buena nueva, una feliz noticia, que nos llene el corazón de alegría y consuelo. La enseñanza de Jesús es exigente, pero se puede, no es un imposible…

Teresa del Niño Jesús nos ayuda a percibirla realmente como una buena nueva, puesto que para ella el Evangelio no es otra cosa que la revelación de la ternura de Dios, de la misericordia de Dios con cada uno de sus hijos, y señala las leyes de la vida que llevan a la felicidad. El centro de la vida cristiana es acoger con reconocimiento la ternura y la bondad de Dios, revelación de su amor misericordioso, y dejarse transformar por dicho amor.

El itinerario espiritual tomado por santa Teresita, el “caminito”, es un auténtico camino de santidad, un camino con cabida para todos, hecho de tal manera que nadie puede desanimarse, ni los más humildes, ni los más pobres, ni los más pecadores. Teresa anticipa así al Concilio Vaticano II que afirma con seguridad que la santidad no es un camino excepcional, sino una llamada para todos los cristianos, de la que nadie debe ser excluido. Hasta el más vulnerable y miserable de los hombres puede responder a la llamada a la santidad.

12/5/20

luego hay que confesarse...

PD1: Ya sé que no podemos hacer una confesión sacramental todavía. Se podrá el 18 de Mayo que vuelven a abrir las iglesias y se volverá a celebrar culto. Mientras tanto hay que hacer una confesión particular y esperar a que se pueda para hacer una acumulada de las previas sin confesor. Muy interesante lo que dijo el otro día el Papa: concreción para que así haya dolor y arrepentimiento, de ahí la vergüenza. Y no vale lo genérico, lo indefinido. Esto lo sabía yo, que me pasé de confesarme muchos años de soberbio, hasta que un cura me dijo que le especificara el cuándo y el cómo, que era la única forma de luchar contra lo indefinido…

11/5/20

un encuentro

PD1: No seguimos un libro, no es una doctrina, es un encuentro diario con el Señor. Es amor, reconocimiento por su grandeza y por habernos creado, y amor a los demás como nos dijo…

8/5/20

nada podemos solos

PD2: San Marcos dejó muy claro el resumen del evangelio justo antes de la Ascensión:

“En aquel tiempo, Jesús se apareció a los once y les dijo: «Id por todo el mundo y proclamad la Buena Nueva a toda la creación. El que crea y sea bautizado, se salvará; el que no crea, se condenará. Estas son las señales que acompañarán a los que crean: en mi nombre expulsarán demonios, hablarán en lenguas nuevas, agarrarán serpientes en sus manos y aunque beban veneno no les hará daño; impondrán las manos sobre los enfermos y se pondrán bien”.

Especificó con nítida claridad quien se salvará y quién se condenará. Lo dejó al albur de la fe. Toda nuestra vida hemos experimentado la fe de una manera u otra. El Señor nos ha ido buscando siempre. Nosotros, con nuestra libertad, la hemos acogido o no. Luego en otro pasaje nos recordó la importancia de las obras. La fe no basta solamente, hace falta el amor: las obras de la fe…

Nosotros no podemos solos. Es el Espíritu Santo el que nos ayuda ahora y siempre. ¿Cómo sería posible que en 2000 años, un conjunto de 12 hombres sencillos, sin estudios, pudieran extender el evangelio a los miles de millones de personas que se declaran católicos hoy en día? Nosotros nos dejamos para ser meros instrumentos, aunque, con nuestra torpeza, solemos incordiar. Pero somos vitales en esta tarea…

7/5/20

nuestra rutina en el confinamiento

PD1: Estos días de confinamiento he podido comprobar lo muy distintas que son ambas generaciones, la de los hijos y la de los padres. Pero aún y todo, nos hemos llevado muy bien estos días. Hemos vivido el matrimonio con chicos de 26, 25, 22, 15 y 14 años (tres mujeres y dos varones), echando mucho de menos a dos hijos casados, y a otros dos que, por trabajo, andan en Italia y Holanda. Y por supuesto, a mis 8 nietos y medio…

Han currado como leones. Durante la semana era impresionante ver el espíritu de trabajo que había en casa. Cada uno en su cuarto trabajando. Las niñas pequeñas en el comedor atendiendo a las clases del colegio, mi mujer currando como una loca. Ha sido muy intenso el ritmo de trabajo (yo me sigo despertando al alba para que me de tiempo a todos mis quehaceres…). Y cada fin de semana aprovechábamos para descansar y orearnos, haciendo cosas distintas…

No hemos tenido bronca alguna. Los chicos son muy buenos y han ayudado mucho. Han hecho planes con amigos por Internet, han visto películas, no muchas, han jugado entre hermanos. Nos hemos tomado algún whiskey que otro. Han cocinado y creo que se lo han pasado mejor de lo que se esperaban… (quizás no debemos preguntarles)

Los padres hemos tenido mucha mano derecha para evitar los momentos de letargo y aburrimiento. Los fines de semana hemos promovido de todo, desde unas olimpiadas deportivas, pasando por viajes virtuales, donde a cada hijo le tocaba cocinar comida de un país distinto, con música de ese país, con concurso de nombres ilustres de esos países… Hemos jugado al ping pong en el comedor, al padel en un jardín de 5 metrosx5metros, hemos pateado, jugado al baloncesto, jugado al voleibol… Probablemente nos odien los vecinos, ya que hemos hecho bastante ruido. Hemos aplaudido todos los días a las 20:00, y celebrado la Misa a las 20:05 por Internet (algo que varios de ellos no estaban acostumbrados)… Y sobre todo, hemos hablado y hablado, mucho palique, mucho contarnos nuestras cosas, que es de lo que trata la familia…

Y bastantes risas, hemos hecho todas las tonterías del mundo que se nos iban ocurriendo, pero de buen rollo, sin meternos con nadie, sin reírnos de nadie, sin hablar mal de nadie (solo de los políticos, de los que estamos muy hartos).

6/5/20

el remedio contra el virus es el AMOR

PD1: El amor como remedio para salvarnos del virus:

Cómo se derrota al virus

Leí un texto en la web de CinemaNet (aquí) tomado de C.S. Lewis y escrito en 1948, cuando la gente se aterrorizaba pensando en la amenaza de la bomba atómica («On Living in an Atomic Age» (1948), en Present Concerns: Journalistic Essays). Copio:

«En cierto sentido nos preocupamos demasiado por la bomba atómica. “¿Cómo vamos a vivir en la era nuclear?” Siento la tentación de responder: “Pues como hubieras hecho en el siglo XVI cuando la peste visitaba Londres casi cada año, o como hubieras vivido en la época de los vikingos cuando saqueadores escandinavos te podían degollar cualquier noche; o, de hecho, tal y como haces ahora en la era del cáncer, de la sífilis, de los ataques aéreos o de los accidentes ferroviarios o de tráfico.

En otras palabras, para empezar, no exageremos la novedad de nuestra situación. Créanme, estimadas damas y caballeros, ustedes y todos aquellos a quienes aman ya fueron sentenciados a muerte antes de la invención de la bomba atómica: y un porcentaje significativamente alto de nosotros moriremos de un modo poco agradable. Es verdad que tenemos una gran ventaja respecto a nuestros ancestros, la anestesia, pero seguimos sujetos a lo anterior. Es completamente ridículo lamentarse y dibujar caras largas porque los científicos hayan añadido una más a las posibilidades para una muerte dolorosa y prematura en un mundo que ya nos ofrecía suficientes problemas similares y en el que la muerte misma no es una posibilidad, sino una certeza.

Este es el primer punto para tener en cuenta: y la primera resolución que debemos tomar es mantenernos unidos. Si todos vamos a ser arrasados por una bomba atómica, que sea realizando acciones humanas dignas de nuestra condición: rezar, trabajar, leer, escuchar música, bañar a los niños, jugar al tenis, conversar con amigos en torno a una pinta y un juego de dardos, y no arrinconados como ovejas asustadas y hablando de bombas. Puede que ataquen nuestros cuerpos (un microbio puede hacerlo), pero no dejemos que dominen nuestras almas»

El mensaje es claro: un peligro no se vence con una fuerza mayor, sino con algo capaz de cambiar nuestra vida. Eduardo Navarro, el autor del texto del que tomo la cita de Lewis, acaba citando una escena de «El señor de los anillos», en que el mago Gandalf y la elfa Galadriel comentan por qué el primero ha elegido a un elfo, Bilbo Bolsón, para llevar el anillo. El argumento de Gandalf es que Bilbo sabe amar, «porque es el amor en las cosas pequeñas lo que en realidad hace retroceder al mal«. Me parece una bonita manera de decir que el miedo al coronavirus se combate con el amor en la vida ordinaria: esto no garantiza que no vayamos a morir, sino que nuestra vida valga la pena.

5/5/20

somos frágiles

PD2: El Papa Francisco ha dicho: En la prueba que estamos atravesando, hemos comprobado que somos frágiles. Necesitamos al Señor, que ve en nosotros, más allá de nuestras fragilidades, una belleza insuprimible. Con Él descubrimos que somos muy valiosos incluso en nuestra fragilidad.

4/5/20

indulgencia plenaria

PD1: Tenemos indulgencia plenaria cada día, que se puede aplicar por alguien. ¿Cómo se gana?
Para lo cual es tan fácil como asistir a Misa por Internet o la televisión, hacer una comunión espiritual, y hacer una confesión previa a la presencial como nos dijo el Papa hace unos días.