10/12/18

nos estrenamos cada día

PD1: La actitud de alerta, de preparación, no puede ser intermitente, sino que ha de ser permanente. Por esto, nos dice el Señor: “Estad en vela, pues, orando en todo tiempo” (Lc 21,36). ¡En todo tiempo!: ésta es la justa medida del amor. La fidelidad no se hace a base de un “ahora sí, ahora no”. Es, por tanto, muy conveniente que nuestro ritmo de piedad y de formación espiritual sea un ritmo habitual (día a día y semana a semana).

Ojalá que cada jornada de nuestra vida la vivamos con mentalidad de estrenarnos; ojalá que cada mañana, al despertarnos, logremos decir: Hoy vuelvo a nacer (¡gracias, Dios mío!); hoy vuelvo a recibir el Bautismo; hoy vuelvo a hacer la Primera Comunión; hoy me vuelvo a casar... Para perseverar con aire alegre hay que “re-estrenarse” y renovarse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario