la forma de amar a Dios es glorificarle

PD: Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. Cuantas veces habremos repetido esta oración.

Y es todo lo que debemos hacer: glorificar a las tres Personas durante nuestra jornada.

Es el mejunje del cristianismo: amar a Dios y al prójimo. Y para amar a Dios, que mejor manera que darle Gloria a las tres Personas. Tratando a las tres Personas, al Padre creador, al Hijo redentor y al Espíritu Santo que habita en nosotros cuando estamos en Gracia.

Qué fácil es imaginarnos a Dios Padre, que nos hizo a su imagen y semejanza. Será como nosotros. A Dios hijo, que lo tenemos muy metido en la cabeza, nos sabemos casi de memoria su Palabra y le recordamos colgado en la cruz para salvarnos… Lo hemos tratado siempre…

Pero a la persona de Dios Espíritu Santo, que es más trasparente, no es fácil ponerle cara… Y lo tenemos muy cerca, todos los días con nosotros, no como el Ángel de la Guarda, que es sólo un ángel, sino a Dios vivo y verdadero que habita en mi y no lo veo, pero si lo siento, cuando me fijo…

Pues eso, la forma de amar a Dios es glorificarle todos los días, en las tres Personas que son. Que todo lo que hagamos sea para su Gloria…