14/10/14

¡qué buena gente!

PD3: El otro día tuve un percance. Me sentó mal la cena, total que a la una de la noche me mareé, perdí el conocimiento y me pegué un mamporro en mitad del salón de casa de aúpa. Mi cara echa fosfatina… Total que ante el temor de que hubiera sido algo más grave, nos fuimos de urgencias a que me miraran. Seis horitas en el Hospital Puerta de Hierro, donde nos trataron de maravilla. La moraleja no es contarte mi caso, que es secundario, si no lo que fuimos siendo testigos ahí: Un pobre hombre muy mayor que no hablaba, lo tenían con un pañal a la espera de ponerle la sonda. Como estaba sólo, se le acercaba la gente y le daban la mano, le acariciaban la cabeza… ¡Pura ternura ante el desconocido! Otra señora con un alzheimer de campeonato, nos deleitó durante 5 largas horas, con una perorata de sus molestias… Y dos familiares suyos, de pie, atendiéndola con tanto mimo y cariño, con tanta paciencia… Delicioso, ya que yo la habría acogotado. Cuánto aprendimos… ¡Qué buena gente hay por todas partes!

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