España

Siempre se ha hablado de las dos españas; yo creo que hay cuatro. Hay dos, la España RICA y la España POBRE, que a su vez se dividen en otras dos:

La rica:

ESPAÑA OPULENTA: Aquella compuesta de grandes patrimonios, de gente con pasta, de gente con mucho dinero, de empresarios, de ricos de toda la vida que son capaces de mantener su gran patrimonio, de nuestros 100.000 representantes públicos, de la gente con buen sueldo…, en definitiva de gente con dinero y sin problemas de trabajo. Es el prototipo de cliente de banca privada, de megabanco que te cagas, y que aunque le crujan no le importa mucho…Alguno de vosotros es de este grupo, pero los menos; prefieren su banquero de toda la vida…

ESPAÑA PRETENCIOSA: La fardona. Son aquellos que les encantaría llegar al escalón anterior, que hacen lo que sea por vivir de forma similar a esos, pero con grandes sufrimientos ya que no llegan ni llegarán nunca, salvo que les toque la lotería. Son esos que son capaces de comprarse coches de 30.000 euros y más a crédito, que viven en unas casas lejos de sus posibilidades, que viajan a sitios exóticos, que gastan mucho más de lo que tienen… y que están endeudados hasta las orejas, sin tener un trabajo para toda la vida (ya no los hay)… No tiene perfil de ahorro alguno ya que todo lo deben… y poco ahorran.

La pobre:

ESPAÑA AHORRADORA: Es la España de siempre, esa que no se fía de nada, que ha cultivado el ahorro como modus vivendi, que hubo una época que se dio algún capricho, pero que su forma de vida es sencilla, y pensando siempre en el mañana. Que ha heredado esta virtud de austeridad de sus padres y la ha cultivado. Es esa España de aquellos que, pudiendo comprarse un coche de 30.000 euros, tienen uno más sencillo; que pudiendo vivir en una casa de lujo, optan por una de peor calidad, siempre pensando en el mañana, siempre guardando algo por si acaso… Está dentro de la España pobre no por su condición. Hay mucha gente con dinero en este apartado, pero no viven para el dinero, no funcionan por él dinero…simplemente saben que lo tienen porque están habituados a ahorrar, lo tienen sistematizado. (Aquí se encuadran la mayoría de mis clientes).

ESPAÑA CURRANTE: No es que sea tan pobre, es la de la clase trabajadora por excelencia, la de la clase obrera (blue collar), la de los administrativos (white collar) y del personal que por mucho que quiera gasta lo que ingresa, no son capaces de ahorrar más que migajas. Es de aquí de donde ha salido la gran clase media que casi todos formamos. El título no es el adecuado. Afición al trabajo no es que la tengan muy grande. Afición lo que se dice afición la tienen al futbol, al bar, a la juerga, es nuestra idiosincrasia…

Recientemente podemos hablar de una clase pobre, de esta gente que ha  tenido problemas y que las cosas le han ido a menos y las están pasando canutas. De ese millón de familias que vive de ayuda de Cáritas…, gracias a la denostada iglesia

Si te fijas, hay gran distinción entre las 4 españas que te dibujo. Hace años había dos: la rica, poco numerosa, y la pobre, el resto. Después se formó una enorme clase media que casi todo lo aglutinaba. Todos éramos iguales. Ahora ya no, ahora hay cuatro tipos de personas muy diferenciadas. Todos seremos clase media, pero por nuestros comportamientos dejamos de ser todos iguales.

Y si me dejas que siga con este rollo antropológico, las aficiones de todos son las mismas. Todo quisqui se mueve por las mismas pasiones: fútbol (embotamiento general y anestesia total), amor por los coches/estilismo (siempre queriendo tener lo del vecino, nuestro cáncer, siempre queriendo aparentar lo que no somos…España país de concesionarios de automóviles y de clínicas de estética, ópticas y peluquerías), ocio (agencias de viajes, restaurantes, bares. Somos un país de bares, donde nos encanta tomarnos cañas y tapas… Recientemente y para los jóvenes, somos un país de botellón, nos destrozamos la salud, el hígado, por mor de ser más cachondos con los amigos, por el hecho simple de estar cuasi siempre mamados…), deporte/cultura (incipiente pero contundente, sobre todo gracias a Decathlon… y a las maravillas que hay en nuestra querida España) y afición a la sucursal de bancos/cajas de ahorros (para esos ahorradores, somos un país que lo único que tiene con entidades de crédito que sirven para no ver un euro de rendimientos y para que nos desplumen en comisiones e intereses. País de catetos financieros con cartilla o libreta…País fiel a sus bancos y al de la sucursal…aunque nos haya engañado miles de veces con sus mierdas).

Si te fijas, esto es lo que le gusta a los españoles. Esto es lo que teníamos que potenciar como nuestro negocio. Para un país turístico como es España todo lo que se haga por desarrollar el turismo interior y el exterior en estos frentes (futbol, estilismo, bares, gastronomía, deporte, cultura…) es lo que nos hará un país rico. Todo lo que nos dediquemos a gastar en otros aspectos ajenos a estos frentes es derrochar; no vale nada, es tirar el dinero, no es nuestro negocio. Es como si le dices a Alemania que no gaste en I+D para mejorar sus patentes e ingenios industriales y sus ventas a todo el mundo de su cacharrería y máquinas… Aún así, parece que no se han dado cuenta de nuestro potencial. Es nuestro ingenio (futbolistas, estilistas, cocineros, hoteleros, deportistas…), y nuestras piedras. Les encanta a los extranjeros, junto con la paella, el sol y la sangría.

Nos movemos guiados por estos cuatro frentes. Vivimos para el futbol, por el coche, para que nos vean guapas/os, en el bar y hacemos algo de deporte y algún viajecito…Nos vemos bien, modernos, hemos tragado con todas las leyes progresistas y transgresoras que nos ponían por delante, todo por ser más que nuestros vecinos, por fardar, país de fardones donde los haya…

Ya no somos ese país generoso donde la familia era lo más importante. Y sin embargo, sí que lo es para casi todos, pero no ya tener descendencia. Se ven a los hijos como una carga. La gente es consciente de que el futuro es complicado y optan por vivir el momento, Carpe diem. El mañana no es importante…la sucesión, menos…

Pues con perdón, y sabiendo que todo esto que te cuento no se puede decir, no me gusta nuestra España actual un pimiento. Me identifico con mi España AHORRADORA, pero no con esas aficiones colectivas que tenemos, en teoría todos. Ni me gusta el futbol, ni me gusta fardar de coche (tengo una mierda de furgoneta Trafic), ni me gusta ir de tiendas ni comprarme ropa, ni me gusta estar en el bar de palique todas las horas del mundo, ni me gusta el footing, ni las colas de los museos… Me gustan las iglesias, esas que a la gente le entran escalofríos por entrar; me gusta el campo, pero no para pastar todo el fin de semana, me gusta para pasear; me gusta ir bien vestido, pero no aguanto las apariencias ni el aparentar…¿Qué quieres que te diga? Creo que soy muy rarito. No me gusta lo que le gusta a los demás. A mí lo que me gusta es otra cosa: mi pasión es mi familia y criar a mis nueve hijos. Trabajar lo mejor que pueda, ser útil a la sociedad, ayudar a la gente, divertir al aburrido, ser gracioso y entretener…Te acabo de soltar un rollo descomunal del que seguro no estarás de acuerdo con nada. Qué le vamos a hacer…si todos pensáramos igual sería un rollo. Un abrazo

PD1: No pienses que esta clasificación es despectiva. Cada uno es como es y todos somos Hijos de Dios. Hasta que no te das cuenta de este matiz, te vas perdiendo muchos detalles. La gente que te rodea, los de tu entorno son distintos a uno mismo. Si fuéramos todos iguales sería un horror. Recuerdo cuando yo era aprensivo con la gente de color. Se me quitó en cuanto me tocó unas semanas consecutivas tener que dar la paz en Misa todos los días a un señor muy bien trajeado pero negro como el tizón. Dios nos hizo a todos porque quiso y todos somos hermanos. Pero hermanos como los de tu familia de sangre. Sí, ese pesado que repeles, también; ese pobre harapiento y sucio, también; el portero antipático, también; el jeta del panadero, también… Si lo entendiéramos, sería más fácil; si lo viviéramos, si les quisiéramos como hermanos, haríamos un mundo mejor…