Dios nos perdona, una vez y otra, y las que haga falta...

PD8: Ayer me tuve que volver a confesar por una falta de caridad con el prójimo. Qué cosas. Sólo hacía dos días que no pasaba por el confesionario. No puedo andar cada tan poco a hablar con el cura a pedirle árnica… Encima el cura me dijo que le debía pedir perdón al causante, para quitarme del todo mi soberbia… Eso hice, con apuro primero, pero con gozo después… El sabernos perdonados por Dios, ¡qué gran invento! ¡Qué contento te quedas luego! Aunque hubieran pasado sólo dos días, merece la pena…, ya estoy dispuesto para el día que nunca se sabe cuando llega… Por vergüenza de decirle las cosas a un cura no me puedo perder la eternidad. Estoy convencido que Dios nos quiere limpios… El ser humano es el que, con su endiosamiento se cree por encima de los demás. Pero no, se agacha la cabeza, se pide perdón y limpio de nuevo. Luego caeremos una vez y otra…, pues a levantarnos y vuelta a empezar…